En el mundo se viven momentos de expansión en conocimientos, ganas, esfuerzo, creatividad, talento e innovación. Si consideramos que el 80% de TODOS los investigadores DE LA HUMANIDAD están vivos, es lógico pensar que en el sector salud se vienen grandes avances, disruptivos y desafiantes. América Latina presenta grandes adversidades pero que sin lugar a dudas será terreno fértil para grandes avances e innovaciones, teniendo como eje el CONOCIMIENTO.
En estos últimos años de a poco me fui metiendo en el ecosistema de emprendedores, y he visto StartUps consolidadas y otras en sus comienzos. También fui conectando y hablando con inversores, aceleradoras e incubadoras y tuve el privilegio de acceder a 4 incubadoras, programas de mentorías y programas de formación en modelo de negocios con nuestro propio desarrollo. En este camino fascinante, me encontré con grandes ideas, prototipos, pruebas de conceptos y desarrollos finales en el sector de Salud, que me permitieron dimensionar el crecimiento que este sector tiene y lo que va a tener. Sumemos el desafío que el sector salud tiene, con metodologías diagnósticas cada vez mejores, pero más caras, crecimiento de la población y en la longevidad. Por lo tanto, no solo debemos pensar en la salud que tenemos sino en la salud del futuro.
Pero el foco que me gustaría compartir con Uds. es que he visto desarrollos en salud realmente muy buenos, con inversiones concretas, realizados por mentes brillantes, pero sin embargo no terminan de despegar. Si no es el dinero (porque tienen inversiones), no es lo disruptivo (porque tienen desarrollos realmente muy buenos y creativos), si no es la capacidad intelectual (porque son profesionales entrenados), que está fallando o FALTANDO?.
Intentando hacer una crítica constructiva he visto 3 puntos a tener en cuenta para las startups en salud:
1-Falta en el equipo un profesional que entienda las demandas y la adoptabilidad del desarrollo en el sector salud.
2-Falta un profesional especialista en el tema que pueda aportar si el desarrollo permite sustituir o mejorar algo existente.
3-Falta entender que la ciencia básica debe nutrirse de la ciencia aplicada si quieren hacer verdadera, durable y disruptiva transferencia tecnológica y eso está generalmente en los hospitales.
La revolución industrial 4.0 nos pasa por arriba y el gran desafío es NO COMPETIR, sino complementarse. Prefiero empresas cebras a empresas unicornios. El mundo necesita empresas que se sostengan en el tiempo, y si tiene triple impacto estamos en camino. Si esto se da, llegaremos a las metas personales más deseadas por todos: libertad, expansión y empatía.